¿Qué es lo que sucede cuándo buscamos en Google la palabra bebé?
Pues sucede que se nos muestra una imagen muy alejada de lo que es en realidad un bebé.
Menos una imagen del pantallazo, el resto (15 fotografías) muestran bebés felices, tranquilos, risueños, limpios, satisfechos… además, no lo olvidemos, todos caucásicos, sin ningún tipo de discapacidad y muchos de ellos solitos, descansando en la cama.
Internet, las redes sociales y la televisión tienen la capacidad de modificar o crear imaginarios colectivos, y en este caso, como en muchos otros, los conceptos como bebé o crianza o maternidad se alejan bastante de la realidad.
Los y las bebés lloran como parte de su expresión y comunicación, así piden, expresan y se relacionan con sus adultos/as de referencia y con el entorno. Es una forma más de interacción.
Además hay bebés que enlazan cólicos y salida de dientes… cuando todo parece acabar vuelta con la salida de colmillos (suelen ser los más dolorosos), estreñimiento…
Muchas veces el crecimiento no es fácil y sienten incomodidad, cansancio y dolor.
Además de llorar, los peques se ensucian, vomitan, se enfadan, y muchos otros tienen el semblante serio, un bebé no tiene por qué ser especialmente risueño.
Estas imágenes en los buscadores junto con el escaso contacto que tiene nuestra sociedad con los bebés, niñas y niños hace que no tengamos ni idea de a lo que nos enfrentamos cuando tomamos la decisión de ser madres.
Bienvenidas a la maternidad real.
Os abrazo.
Gloria Morata,
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